El Value Investing, o inversión en valor, es una filosofía de inversión que se centra en la búsqueda de acciones subvaluadas en el mercado.
Esta estrategia, popularizada por inversionistas como Benjamin Graham y Warren Buffett, se basa en la premisa de que el mercado a veces valora incorrectamente una acción, ofreciendo así oportunidades para obtener rendimientos superiores.
Glosario del contenido del artículo:
- ¿De qué trata el Value Investing?
- 3 indicadores financieros clave para un Value Investing
- Aplicación del Value Investing mediante ETFs
- ¿Cómo se puede invertir en Valor?
- Perspectivas bursátiles del Value Investing en el año 2024
- Margen de seguridad de Value Investing
- Dividendos
- Diversificación
- Riesgo y volatilidad
- Consejos adicionales
Prueba la estrategia de Value Investing en un bróker seguro
La esencia del Value Investing radica en identificar empresas cuyo valor intrínseco sea mayor que su precio de mercado actual.
Los inversores en valor buscan acciones de empresas sólidas, pero momentáneamente infravaloradas, lo que les permite comprar a un precio más bajo en comparación con su verdadero valor.
Este enfoque implica un análisis exhaustivo de los fundamentos de una empresa, como sus estados financieros, flujo de efectivo, posición en el mercado y perspectivas futuras.
A través de este proceso, los inversores en valor buscan comprender la verdadera salud y el potencial de crecimiento a largo plazo de una empresa.
El Value Investing no se trata solo de comprar acciones baratas, sino de invertir con un enfoque disciplinado y a largo plazo.
Al seguir principios fundamentales y mantener una visión a largo plazo, los inversores en valor buscan construir carteras sólidas y resistir la volatilidad del mercado, aspirando a lograr rendimientos consistentes a lo largo del tiempo.
¿De qué trata el Value Investing?
La estrategia del Value Investing se caracteriza por ser una aproximación a largo plazo, enfocada en la inversión en empresas sólidas y de alta calidad que se perciben como subvaloradas en el mercado.
En su esencia, el inversor en valor busca identificar oportunidades en acciones, bonos, divisas, propiedades o commodities que presenten un descuento significativo con respecto a su valor «intrínseco».
La metodología del Value Investing implica la identificación selectiva de estas empresas y la adopción de una perspectiva a largo plazo en relación con el valor de sus acciones.
La esperanza subyacente es que, con el tiempo, otros inversores reconocerán el potencial subyacente de estas acciones y comenzarán a invertir, lo que, a su vez, puede impulsar el aumento del precio de las acciones.
Este enfoque se basa en un análisis detenido de los fundamentos financieros, evaluando cuidadosamente el rendimiento pasado y las perspectivas futuras de las entidades en las que se invierte.
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¿Por qué una empresa cotiza menos del valor que posee?
Existen diversas razones que pueden fundamentar este escenario, por lo que analicemos algunas de ellas:
- Desempeño económico insatisfactorio: Cuando una entidad divulga resultados financieros por debajo de las expectativas, los inversores suelen reaccionar emocionalmente, generando una disminución en el valor de sus acciones, lo que suele ocurrir particularmente cuando los informes revelan ganancias inferiores a lo anticipado.
- Fluctuaciones en el mercado: En ocasiones, eventos inesperados, también conocidos como «cisnes negros», pueden desencadenar la huida de los inversores del mercado de valores en busca de activos seguros o liquidez. La burbuja tecnológica del 2000, la crisis financiera de 2008 o la pandemia de coronavirus de 2020, son ejemplos de episodios que afectaron significativamente el mercado de valores.
- Cambios en la dinámica industrial: A lo largo del tiempo, los patrones de consumo evolucionan o se implementan nuevas regulaciones gubernamentales, cambios que pueden provocar transformaciones significativas en la dinámica industrial, llevando a los inversores a abandonar ciertos sectores, incluso si una empresa sigue operando eficientemente en ese entorno. Considera las empresas automotrices tradicionales durante la expansión de la industria de vehículos eléctricos.
- Información específica de la empresa: A pesar de la transparencia proporcionada por las compañías que cotizan en bolsa al publicar estados financieros auditados, aún existe la posibilidad de fraude y escándalos corporativos. El caso de Enron en 2001, Worldcom en 2002, AIG en 2004, Lehman Brothers en 2008, Tesco en 2014 o VW en 2015, son ejemplos de situaciones que impactaron negativamente en el valor de las acciones.
Los inversores en valor buscan identificar estas oportunidades y adoptar una perspectiva a largo plazo, confiando en que la empresa eventualmente se revalorizará acorde a su verdadero valor intrínseco.
3 indicadores financieros clave para un Value Investing
Revisión detallada sobre los tres indicadores financieros preeminentes para las acciones que se alinean con la filosofía de inversión en valor:
1. Ratio Precio/Beneficio (PER)
El Ratio Precio/Beneficio (PER) representa una métrica fundamental esencial para evaluar si el valor de las acciones de una empresa está subestimado o sobrevalorado de manera eficiente.
La relación precio/beneficio es una simple división entre la capitalización bursátil de la empresa y sus beneficios por acción (BPA). Este indicador facilita la comparación entre la valoración de las acciones de la empresa y sus ganancias.
Si bien su utilidad por sí sola es considerable, su verdadero poder se revela al contrastarlo con el PER de otras compañías del mismo sector.
Por ejemplo, al comparar el PER de empresas como Wal-Mart, Costco y otros minoristas, se obtiene un sólido índice precio/beneficio para el sector en su conjunto.
Un PER reducido indica una posible subvaloración de la empresa, indicando que el precio de sus acciones es relativamente bajo en comparación con las ganancias que genera. Este indicador puede servir como fundamento estratégico para nuestras decisiones de inversión de valor.
2. Ratio Precio/Valor Contable (PVC)
El índice precio/valor contable evalúa el precio de las acciones de una empresa en relación con su valor contable registrado.
Este indicador se obtiene dividiendo la cotización de las acciones de la empresa entre su valor contable, calculado como el valor neto de los activos menos pasivos, dividido por el total de acciones en circulación.
Este enfoque ayuda a los inversionistas a determinar cuánto recibirían en caso de liquidar la empresa.
Siguiendo la filosofía de Benjamin Graham, mentor del value investing y guía de Warren Buffett, los inversores de valor deberían centrarse en acciones cuya capitalización de mercado sea aproximadamente dos tercios menor que su valor contable.
3. Rendimiento de dividendos
El rendimiento de dividendos refleja los ingresos anuales (dividendos) como porcentaje del precio de las acciones.
Es importante destacar que muchas empresas distribuyen parte de sus beneficios periódicamente a los accionistas en forma de dividendos. Este índice se calcula dividiendo el dividendo anual entre el precio actual de la acción.
Un rendimiento de dividendos elevado podría indicar un mayor ingreso para el inversionista.
No obstante, dado que la rentabilidad de los dividendos tiene una relación inversa con la valoración de las acciones, se requiere un análisis más profundo de las acciones con altas tasas de rendimiento de dividendos.
Por ejemplo, una alta rentabilidad por dividendo sugiere un precio de acciones relativamente bajo, lo que subraya la necesidad de una investigación exhaustiva sobre las razones detrás de esta situación.
La clave reside en identificar empresas de alta calidad con una sólida rentabilidad de dividendos.
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Aplicación del Value Investing mediante ETFs
Los Fondos Cotizados en Bolsa (ETFs) representan instrumentos de inversión diseñados para replicar el desempeño de mercados, sectores o industrias específicas. Por ejemplo:
Existen ETFs que rastrean el comportamiento de acciones en diversas regiones geográficas, proporcionando acceso a mercados a los que los inversores convencionales podrían no tener fácil acceso.
El ETF iShares MSCI South Korea, por ejemplo, ofrece a los inversionistas una exposición integral al mercado de valores de Corea del Sur. Algunos ETFs realizan un seguimiento de industrias o subsectores específicos, incluyendo áreas tradicionales como la agricultura.
Otro ejemplo se observa con el ETF del Fondo Agrícola PowerShares DB, por su parte, ofrece a los inversionistas acceso a contratos de futuros de productos básicos en el sector agrícola. El tipo de ETF más favorecido entre los inversores institucionales monitoriza las fluctuaciones de los índices bursátiles.
Por ejemplo, el ETF iShares S&P 500 Value sigue el rendimiento de todas las acciones que componen el índice S&P 500 y que son consideradas como subvaloradas.
iShares, una entidad de BlackRock, es responsable de la creación, mantenimiento y gestión de diversos ETFs, como el ETF Value iShares S&P 500, diseñado para facilitar a los inversionistas la exposición a inversiones basadas en valor sin necesidad de seleccionar acciones individualmente.
Todos los proveedores de fondos ofrecen documentos informativos para ayudar a los inversionistas a comprender mejor el ETF y su proceso de selección, ofreciendo a los inversores cotidianos la oportunidad de profundizar en la fundamentación de las acciones en un fondo específico.
A modo de ejemplo, el iShares S&P 500 Value ETF selecciona sus acciones de valor centrándose en empresas maduras con un rendimiento de dividendos significativo.
Una distinción entre la inversión en valor y la inversión en crecimiento (growth investing) radica en que los fondos de crecimiento a menudo invierten en compañías dentro de industrias más novedosas, ofreciendo perspectivas de apreciación de capital a corto plazo.
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¿Cómo se puede invertir en Valor?
Una vez hayas instalado y configurado tu plataforma de trading MetaTrader 5, abrirás un mundo de posibilidades para explorar y gestionar diversos Exchange Traded Funds (ETFs) de valor de manera eficiente y profesional.
A continuación, resaltamos un procedimiento detallado para llevar a cabo esta tarea con éxito:
Primero, inicia sesión en tu plataforma MetaTrader 5 para acceder a su interfaz intuitiva y funcional. Una vez dentro, dirígete a la ventana de Observación del Mercado desde la pestaña «VER» en la barra de menú superior.
Aquí, despliega las opciones haciendo clic con el botón derecho en la Observación del Mercado y selecciona la opción «Símbolos».
En la ventana de SÍMBOLOS, utiliza la función de búsqueda ingresando «value» en el cuadro correspondiente, lo que generará una lista completa de instrumentos que contienen dicha palabra clave en su denominación, permitiéndote explorar y seleccionar los ETFs de valor que mejor se ajusten a tus estrategias de inversión.
Una vez identificado el ETF deseado, simplemente arrastra el símbolo desde la ventana de Observación del Mercado hasta el gráfico correspondiente. Para ejecutar una operación, realiza un clic derecho en el símbolo seleccionado y elige la opción «Nueva Orden».
Este paso abrirá un ticket detallado donde podrás ingresar con precisión los detalles de tu operación, incluyendo el volumen, el precio de entrada y cualquier otra configuración relevante.
Esta metodología profesional te proporciona un enfoque estructurado y eficiente para explorar, evaluar y ejecutar operaciones con ETFs de valor directamente desde tu plataforma de trading MetaTrader 5.
Al seguir estos pasos, podrás optimizar tu proceso de toma de decisiones y maximizar el potencial de tus inversiones.
Perspectivas bursátiles del Value Investing en el año 2024
Debido al impacto de la pandemia de COVID-19 en el año 2020, se observó una repentina depreciación en el valor de muchas acciones.
Este fenómeno se originó a raíz del pánico en el mercado, con inversionistas deshaciéndose de sus participaciones.
Sin embargo, a medida que la perspectiva de una vacuna contra el coronavirus se fortalecía hacia finales de ese año, se desencadenó lo que se conoce como una significativa «rotación de sectores».
En este escenario, los inversionistas reorientaron su atención hacia acciones de valor, desplazándose desde aquellas centradas en el crecimiento.
Esta transición la han identificado algunos analistas como una tendencia que podría persistir en la próxima década, conforme evolucionen las tendencias macroeconómicas.
Los criterios para la selección óptima de acciones de valor pueden variar según el enfoque de cada inversor en valor, pero algunos elementos fundamentales deben incluir:
- Posicionamiento sólido y reconocido de la marca en el mercado.
- Rentabilidad robusta en cuanto a dividendos.
- Valoración atractiva en comparación con las ganancias del índice S&P 500.
- Fundamentos sectoriales sólidos.
Teniendo esto como base, vale la pena incluir dos acciones de valor en la cartera de Value Investing para 2024:
AbbVie Inc. (ABBV)
AbbVie, una entidad biofarmacéutica con sede en Estados Unidos emergió en 2013 como resultado de la escisión de Abbott Laboratories.
La corporación, con una fuerza laboral que supera los 30,000 empleados a nivel mundial, despliega su presencia en más de 170 naciones, destacándose en los sectores de inmunología, oncología, virología y fármacos fundamentados en las neurociencias.
Su cartera de productos incluye notables éxitos como Humira, que generó ventas por 18,800 millones de dólares en su primer año como entidad cotizada en bolsa.
No obstante, a pesar de registrar ingresos superiores a los 30,000 millones de dólares, la compañía ha enfrentado litigios vinculados a ciertos medicamentos.
Esta circunstancia ha contribuido a la percepción desfavorable por parte de los inversionistas, reflejándose en un elevado rendimiento de dividendos en la cotización de la empresa.
Significativamente, AbbVie ha elevado sus dividendos de manera consecutiva durante 48 años, consolidándose como un competidor robusto para estrategias de inversión en valor, especialmente dado que sus acciones aún no han alcanzado su cota máxima.
Este contexto, respaldado por fundamentos sólidos a largo plazo, posiciona a la compañía como una atractiva opción de value investing, sustentada en aspectos como:
- La cotización actual de las acciones es inferior a su nivel histórico.
- Un rendimiento de dividendos destacado del 4% al momento de la elaboración de este informe.
Estos factores establecen una base sólida para considerar a AbbVie en el marco de una estrategia de inversión en valor, especialmente considerando que, a finales de 2020, el índice del mercado de valores S&P 500 se situaba en alrededor de 21 veces las ganancias futuras.
Jonhson & Johnson (JNJ)
Johnson & Johnson, una destacada entidad del sector de la atención médica con sede en los Estados Unidos, fue establecida en el año 1886 y cuenta con una fuerza laboral de más de 130,000 profesionales distribuidos en más de 175 países.
Su portafolio de productos de consumo abarca reconocidas marcas, tales como Neutrogena, Band-Aid, Listerine, Aveeno, Benadryl, entre otras. Además de su presencia en el mercado de bienes de consumo, la compañía se destaca por el desarrollo de dispositivos médicos y productos farmacéuticos.
A pesar de sus impresionantes ingresos globales, que superan los 85,000 millones de dólares, Johnson & Johnson ha enfrentado desafíos legales relacionados con litigios sobre su talco para bebés, el cual fue supuestamente vinculado a casos de cáncer.
Ante esta situación, la empresa ha tomado la decisión de cesar la producción de dicho producto debido a la reducción de la demanda, generando un impacto positivo en el precio de sus acciones.
Este escenario ha contribuido a consolidar un rendimiento estable de dividendos que supera el 2.6%, marcando un inicio sólido para el año 2024.
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Margen de seguridad de Value Investing
El concepto de «margen de seguridad» es fundamental en la estrategia de Value Investing. Se refiere a la práctica de comprar activos por debajo de su valor intrínseco, proporcionando un colchón protector contra posibles pérdidas.
En otras palabras, el inversor busca adquirir activos a un precio significativamente menor que su valor real. Este margen de seguridad actúa como un seguro ante la incertidumbre y las fluctuaciones del mercado.
La idea detrás del margen de seguridad es que, incluso si el valor de mercado de un activo disminuye temporalmente, el inversionista no sufrirá pérdidas sustanciales, ya que inicialmente adquirió el activo a un precio inferior a su valor intrínseco.
Benjamin Graham, pionero del Value Investing, destacó la importancia de este principio como una forma de minimizar el riesgo de inversión.
El margen de seguridad no solo ofrece protección en tiempos de volatilidad y la posibilidad de obtener ganancias sólidas según el mercado reconoce y corrige la subvaluación del activo.
Dividendos
Los dividendos son una parte crucial del panorama del Value Investing y juegan un papel destacado en la estrategia de inversión de muchos inversores de valor.
En este enfoque, se valora la estabilidad y sostenibilidad de una empresa a largo plazo, y los dividendos consistentes se consideran un indicador positivo de la salud financiera de una compañía.
Cuando una empresa distribuye dividendos, comparte parte de sus ganancias con los accionistas en forma de pagos regulares.
Este flujo constante de ingresos es atractivo para los inversores de valor, ya que no solo proporciona rendimientos tangibles, sino que también puede ser indicativo de una gestión financiera prudente y un negocio estable.
Para los inversores de valor, la presencia de dividendos confiables no solo ofrece rendimientos actuales, sino que también puede indicar la capacidad de la empresa para generar beneficios a largo plazo.
Además, los dividendos pueden actuar como un amortiguador contra la volatilidad del mercado, proporcionando un ingreso constante incluso en entornos económicos desafiantes.
Diversificación
Los dividendos son una parte crucial del panorama del Value Investing y juegan un papel destacado en la estrategia de inversión de muchos inversores de valor.
En este enfoque, se valora la estabilidad y sostenibilidad de una empresa a largo plazo, y los dividendos consistentes se consideran un indicador positivo de la salud financiera de una compañía.
Cuando una empresa distribuye dividendos, comparte parte de sus ganancias con los accionistas en forma de pagos regulares.
Este flujo constante de ingresos es atractivo para los inversores de valor, ya que no solo proporciona rendimientos tangibles, sino que también puede ser indicativo de una gestión financiera prudente y un negocio estable.
Para los inversores de valor, la presencia de dividendos confiables no solo ofrece rendimientos actuales, sino que también puede indicar la capacidad de la empresa para generar beneficios a largo plazo.
Además, los dividendos pueden actuar como un amortiguador contra la volatilidad del mercado, proporcionando un ingreso constante incluso en entornos económicos desafiantes.
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Riesgo y volatilidad
Son elementos intrínsecos que los inversores deben comprender y gestionar de manera cuidadosa.
Aunque el enfoque de Value Investing se centra en la evaluación de fundamentos sólidos y la búsqueda de activos subvaluados, los riesgos inherentes al mercado financiero nunca pueden eliminarse por completo.
El riesgo se refiere a la posibilidad de pérdida o variación en los rendimientos esperados.
Los inversores de valor reconocen que la toma de riesgos es inevitable, pero buscan minimizarlo a través de un análisis exhaustivo de las empresas y la adopción de estrategias como el margen de seguridad.
Este último actúa como un amortiguador que mitiga las pérdidas potenciales y protege la inversión en momentos de incertidumbre del mercado. La volatilidad, por otro lado, describe la amplitud de los cambios de precios en un período determinado.
Aunque la volatilidad puede generar oportunidades para los inversores de valor al crear fluctuaciones en los precios de los activos, también puede aumentar el riesgo inherente a las inversiones.
Consejos adicionales
En la búsqueda de una inversión sólida y profesional, es esencial asociarse con una institución financiera establecida, rigurosamente autorizada y regulada por las autoridades competentes.
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