En el siguiente artículo vamos a ver qué son los warrants y para qué sirven. Si negocias habitualmente con opciones binarias quizás ya tengas algo de información al respecto.
Pero sino no te preocupes que durante este post vamos a tratar acerca de este tema.
¿Qué son los warrants?
Un warrant es un instrumento financiero derivado que proporciona al comprador el derecho, aunque no la obligación, de comprar y vender un activo subyacente en una fecha determinada y a un precio determinado.
Probablemente esta definición te resulte familiar y eso es porque en cuanto a su funcionamiento los warrants están incluidos en la categoría de las opciones.
Al igual que con las opciones binarias tenemos un warrant de compra denominado call warrant y un warrant de venta denominado con el término put warrant.
El proceder es el mismo que con las opciones, se da al operador la posibilidad de efectuar la transacción de compra o venta asociada y a la otra parte la obligación de efectuarla. Esto es lo que conocemos cómo ejercer el warrant.
Cómo decíamos, los warrants están incluidos en la categoría de opciones, pero conviene destacar dos diferencias básicas: por un lado los plazos de vencimiento y por otro, la liquidez.
- Mientras que las operaciones binarias tienen un plazo de vencimiento máximo de un año los warrants nos permiten disfrutar de un plazo mayor a este.
- Por otro lado los warrants disfrutan de mayor liquidez puesto que son las entidades que emiten los contratos los que se encargan de proporcionarla. En cambio cuando negociamos con opciones binarias la liquidez siempre va a depender del mercado.
Los warrants son valores agrupados que emiten las entidades y que son representados con anotaciones en cuenta, y que cotizan en un mercado organizados.
En las finanzas esta opción es muy segura, pues nos permite comprar valores subyacentes de una sociedad emisora a un precio fijo de ejercicio hasta la fecha de su vencimiento.
Por tanto, ya sabemos que los warrants y las opciones binarias son dos instrumentos bastante similares, los cuales nos pueden proporcionar buenos rendimientos del capital invertido sí sabemos cómo sacarle provecho. Así que sigue leyendo para no perder detalle.
¿Cómo invertir en los warrants?
Decir que los warrants normalmente están asociados a acciones preferentes y bonos, los cuales permiten a la entidad emisora pagar dividendos o tasas de interés más reducidas.
Los warrants son utilizados habitualmente para mejorar el rendimiento de los bonos en cuestión, lo que al mismo tiempo consigue que éstos sean más atractivos para los posibles compradores.
Del mismo modo los warrants se pueden utilizar en ofertas private equity, que es un tipo de actividad financiera a través de la cual una entidad financiera especializada en el capital de inversión adquiere un paquete mayoritario de las acciones que emite la sociedad.
Es muy frecuente que estás ordenes sean desmontables y que se puedan vender de manera independiente, cómo sería el caso de los warrants emitidos como acciones preferentes.
Así los inversores pueden desmontar y vender la orden antes de percibir los pagos de los dividendos.
A menudo los warrants se negocian activamente en determinados mercados financieros. Podríamos destacar por ejemplo el Hong Kong Stock Exchange o el Deutsche Börse.
Para invertir en warrants tendrás que buscarte un bróker que ofrezca este servicio o recurrir a tu entidad financiera de confianza, pues probablemente ofrezca este producto de inversión.
¿Qué tipos de órdenes hay?
Al igual que tenemos diferentes tipos de opciones binarias ocurre lo mismo con los warrants, que encontraremos una amplia selección de tipos de órdenes disponibles.
- Compra de warrants. Ofrecer el derecho a comprar acciones de una empresa a un precio determinado y en una fecha futura antes del plazo de vencimiento.
- Venta de warrants. Al contrario, ofrecer el derecho a vender acciones de una empresa a un precio determinado y en una fecha futura antes del plazo de vencimiento.
Dentro de lo que son los warrants, podríamos destacar los warrants tradicionales, los warrants naked y los warrants de terceros. Vamos a conocerlos con un poco más de detalle.
- Los warrants tradicionales o bonos con warrants se emiten junto un enlace y permiten el derecho de adquirir las acciones de la entidad que emite dicho bono.
- Después, tenemos los warrants naked que se emiten sin un vínculo de acompañamiento pero también se negocian en la bolsa de valores. Habitualmente las emiten los bancos y son conocidos como warrants cubiertos pues se liquidan en efectivo. Estos warrants cubiertos se suelen comerciar junto a la renta variable, haciendo que sea más fácil para los operadores de a pie comprarlos y venderlos.
- Asimismo, también tenemos los warrants de terceros que son derivados emitidos por los que ya tienen el instrumento subyacente. La empresa emite las órdenes que ofrecen al tenedor el derecho a convertir el warrant en una acción.
- Los warrants desmontables nos ofrecen un plus de seguridad, pues se puede separar de la emisión de obligaciones y negociarlos por separado.
¿Qué ventajas y riesgos implican los warrants?
Sí decides invertir en warrants tendrás que definir el riesgo de tu inversión, ya que la pérdida estará limitada a la prima pagada, así que no importará la tendencia del activo en la inversión.
Los riesgos involucrados en los warrants están relacionados principalmente por el valor de tiempo, el cual disminuye con el tiempo, y cuanto más cerca esté la fecha de vencimiento más aumentará la tasa de descomposición el warrant.
En cuanto a las ventajas pues quizás podríamos destacar que los warrants ofrecen comisiones más bajadas, y podremos invertir directamente en la Bolsa, lo cual está muy bien.
Se trata de un producto que también ofrece apalancamiento, por lo que no necesitaremos mucho capital. Pero ten cuidado, el apalancamiento puede ser también una desventaja.
Por último, otra ventaja quizás sería la posibilidad de proteger el portafolio de inversión ya que este tipo de inversiones nos permiten proteger el valor de la cartera cuando el mercado cae.
También podremos hacerlo con acciones en las que hayamos invertido previamente.
