De nuevo nos encontramos hoy con nuevos vaivenes de la moneda única de la zona euro. Esta vez nos toca hablar sobre una recuperación a los 1,24 dólares, tras varias caídas a lo largo de la mañana.

El euro llegó a precipitarse por debajo de los 1,23 dólares aunque en torno a las 16.20 de la tarde GMT se estableció en los 1,2407 dólares. El jueves a esas mismas horas la moneda reina de la zona euro oscilaba en torno a los 1,2355 dólares. Leve recuperación que anima a los más optimistas aunque no despeja muchas dudas sobre el estado de la economía en los mercados europeos.

Hoy mismo el Banco Central Europeo ha fijado el cambio oficial del euro en 1,2322 dólares tras las últimas negociaciones.

Las débiles cifras de creación de empleo por parte de EEUU arrastran al euro a unas cifras bastante preocupantes, unos 1,2288 dólares. Posteriormente la moneda europea recuperó parte de su fuerza alcanzando posiciones superiores, llegó a superar los 1,24 dólares.

Las cifras de desempleo en el país americano son gratas ya que se crearon en torno a los 69.000 nuevos empleos. La cifra que esperaban los expertos era algo mayor pero sin embargo, el desempleo subió algunas décimas alcanzando el 8,2% de paro en la Euro Zona.

La prestigiosa agencia Bloomberg destapó que gracias a ciertos rumores sobre que el BCE va a comenzar a comprar deuda en torno a la zona euro, ha impulsado a la recuperación en parte de la moneda europea. Además factores técnicos como las órdenes de compra automáticas cuando el euro perdiera los 1,23 dólares no hicieron más que favorecer el valor de la moneda.

Para concluir desde el Deutsche Bank algunos expertos en divisas tienen altas expectativas con que la nueva expansión monetaria de EEUU también sea beneficiosa para la moneda de la zona euro. Esto quiere decir ni más ni menos que aunque la Reserva Federal estadounidense haya cesado de comprar por un tiempo deuda, en las próximas fechas eso podría quedar en el pasado.

El débil crecimiento de EEUU obligará a expandir el mercado haciéndose con parte de la deuda europea.

Esto puede aliviar en parte la presión sobre la moneda europea pero la situación griega tiene un poder importante. Los problemas del sector banquero español tampoco ayudan a que la confianza en el mercado europeo retome los tiempos de bonanza que quedaron atrás, la debilidad del crecimiento del euro es una realidad que atrae poco a los inversores. Una cifra significativa es la caída tan notable, no vista desde hace tres años atrás, en el número de gestores compradores de manufactura europea.

Sin duda alguna Europa necesita una seria reforma en términos generales no solo en su modelo económico.